Traducido por Ricardo
PÁGINA 10
Estaba la cama del chico puesta en una habitación pequeña en el desván (sobre el techo
de la casa) donde abundaban las ratas y los ratones; y cada vez que intentaba dormir
Ramsi por la noche, corrían las ratas y los ratones por encima de su cama. Y esto le
imposibilitaba descansar (literalmente: y esto lo hacía incapaz del descanso). Y se
dijo a sí mismo Ramsi, después de pensar un poco:
- “Si tuviera una gata, la haría mi amiga y expulsaría a las ratas y a los ratones.”
Pero el chico no poseía más que un chelín (moneda antigua inglesa equivalente a media
lira).
Página 11
Fue Ramsi al mercado al día siguiente con su chelín en el bolsillo y vio
allí a una mujer que llevaba entre sus brazos una gata y le preguntó
el chico a la mujer:
- “ ¿Serías tan amable de venderme tu gata?”
Y le respondió la mujer:
- “No tengo intención de venderla. Es una gran gata que caza
ratones.”
Y le dijo Ramsi:
- “ Es ésta la que yo necesito exactamente.”
Después le suplicó a la mujer con vehemencia (con pasión, entusiasmo,
sentimiento) para que le vendiera la gata a cambio de su chelín y al
final la mujer se dio por satisfecha.(aceptó el chelín de Ramsi)
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